¡PERDÓNAME, PADRE!

Este poema lo escribi hace unos dias y fue inspirado por un poema hermoso llamado "La Plegaria Del Naufrago." Quize expresar el arrepentimiento por los errores cometidos antes de partir esta vida y la fortuna de aquellos que recapacitan antes de abordar el ultimo tren.


Perdón, Padre,
por no haber entendido esta misión:
la llegada no fue lanzada al azar
y la estadía siempre tuvo una razón.

Perdón,
por tantos despertares sin un rumbo,
abriendo los ojos, pero ciego a ese faro
que me guiaba hacia Tí sin dar tumbo.

Perdón,
embriagado con el placer carnal
fui animal, sediento por saciar mis deseos,
y olvidé regar mi jardín espiritual.

Perdón,
por no entregar la dicha concedida,
regalo que fue derramado en mí
y malgastado en la codicia de esta vida.

Perdón,
no extendí la mano al afligido
ni escuché el llanto del dolor
por sólo disfrutar en mi mundo engreído.

Perdón,
la deuda aún no está pagada
y vacié la cuenta, sin reservas,
sin pensar que habría resultar debitada.

Perdón,
de mi boca salieron cantos:
a veces puros y, otras, con maldición
.... ¡cómo quisiera cambiar los malos
con la melodía de una simple oración!

Ahora tengo en mis manos
las lecciones perdidas.
Y me alejo, a sabiendas
de que están aprendidas.

El tren final ya se aproxima,
ya pocos quedan en la estación,
mas desde el andén me llega Tu presencia:
¡Me alistas nuevo rumbo! ¡Me otorgas tu perdón!

JC